PROPIEDADES
DE LA MADERA
La madera posee una serie de propiedades características que
hacen de ella un material peculiar. Su utilización es muy amplia. La madera
posee ventajas, entre otras su docilidad de labra, su escasa densidad, su
belleza, su calidad, su resistencia mecánica y propiedades térmicas y
acústicas. Aunque presenta también inconvenientes como su combustibilidad, su
inestabilidad volumétrica y su putrefacción.
- Anisotropía. Es un material anisótropo, es decir no se comporta
igual en todas las direcciones de las fibras. Es más fácil cepillar
longitudinalmente al sentido de las fibras que transversalmente, y ocurre a la
inversa con el aserrar.
- Resistencia. La madera es uno de los materiales
más idóneos para su trabajo a tracción, por su especial estructura direccional,
su resistencia será máxima cuando la solicitación sea paralela a la fibra y
cuando sea perpendicular su resistencia disminuirá. En esta solicitación juegan
un papel importante las fibras cortas o interrumpidas y los nudos, que minoran
la resistencia. El esfuerzo de flexión, origina uno de tracción y otro de
compresión separados por una zona neutra, por lo cual la resistencia a flexión
será máxima cuando la fuerza actuante sea perpendicular al hilo y mínima cuando
ambos sean paralelos.
- Flexibilidad. La madera puede ser curvada o
doblada por medio de calor, humedad, o presión. Se dobla con más facilidad la
madera joven que la vieja, la madera verde que la seca. Las maderas duras son
menos flexibles que las blandas.
- Dureza. Está relacionada directamente con la
densidad, a mayor densidad mayor dureza. Al estar relacionada con la densidad,
la zona central de un tronco es la que posee mayor dureza, pues es la más
compacta La humedad influye de manera cuadrática en la dureza. Si la humedad es
elevada la dureza disminuye enormemente. Por el contrario si la madera se
reseca, carece de humedad y se vuelve muy frágil.
- Peso específico o densidad. Depende como es lógico de su
contenido de agua. Se puede hablar de una densidad absoluta y de una densidad
aparente. La densidad absoluta viene determinada por la celulosa y sus
derivados. Su valor oscila alrededor de 1550 kg/m3, apenas varía de unas
maderas a otras. La densidad aparente viene determinada por los poros que tiene
la madera, ya que dependiendo de si están más o menos carentes de agua crece o
disminuye la densidad. Depende pues del grado de humedad, de la época de apeo,
de la zona vegetal, etc. La madera es un material blando cuya dureza es
proporcional al cuadrado de la densidad, decayendo en proporción inversa con el
grado de humedad. Ambas densidades unidas dan la densidad real de la madera. –
Conductividad térmica. La madera seca contiene células diminutas de burbujas de
aire, por lo que se comporta como aislante calorífico; el coeficiente l vale
0,03 en sentido perpendicular a la fibra y vale 0.01 en sentido paralelo a la
fibra. Lo cual quiere decir que su capacidad aislante es mayor en este último
sentido.
MADERA DURA Y MADERA BLANDA
La clasificación de las maderas, a veces, llevan a la
confusión al confundir el tipo de madera con la densidad de la madera.
Las maderas se clasifican en dos: Las denominadas
maderas blandas y las maderas duras.
Las maderas blandas
Son fundamentalmente las coníferas. Las formas de estos
árboles son altos, espigados y en punta. Son árboles de crecimiento rápido y
escasa densidad, dando lugar a troncos rectos y largos que pueden ser
cultivados rentablemente en bosques particulares (por ejemplo, las choperas). Además,
las maderas blandas son fáciles de trabajar y de escasa resistencia. Son
maderas bastante más económicas que las duras, por eso su uso tan extendido en
la construcción, en la ebanistería o en la fabricación de papel y de tableros
de fibras.
Los colores de estas maderas son siempre claros, pero con la
exposición al aire y a la luz tienden a oscurecer.
Asimismo, dentro de la tipología de maderas blandas
podemos encontrar:
a) maderas blandas (por ejemplo: el abeto, el pino)
b) muy blandas (por ejemplo: el chopo, el sauce).
A la que podríamos llamar ‘familia de maderas blandas’
pertenecen, entre otras, las que a continuación vamos a conocer un poco más en
profundidad, para familiarizarnos además con otros aspectos como su
procedencia, su uso, sus características, muy importantes, como ya hemos
apuntado anteriormente, a la hora de elegir la madera con la que se va a
trabajar:
1) Pino Oregón: Madera blanda de grano muy recto, libre
de nudos y de un color pardo rojizo. Muy empleada en Estados Unidos en la
construcción, es fácil de trabajar. En España los usos más frecuentes son para
ebanistería y elaboración de contrachapados.
2) Pino Tea: También conocido como pino amarillo o pino de
hoja larga. Madera blanda de grano duro con un color que combina franjas
alternas de color crema y marrón y, además muy resinosa. Se usó en la
antigüedad para la construcción de muchos muebles destinados a las iglesias. En
la actualidad su uso es habitual en carpintería.
3) Tejo: Se trata de una madera blanda, de grano recto
y denso, cuyo duramen es de color rojo anaranjado y la albura de un color claro
que lo diferencia de forma nítida del duramen. Es una madera muy utilizada en
la decoración, tanto por el juego de sus distintos colores, como por la forma
de sus anillos de crecimiento, pero es difícil de trabajar. Hoy en día su uso
es muy esporádico, cuando no prácticamente inexistente. Durante muchos años se
le atribuyeron poderes mágicos y se usaron en puertas y arcos para proteger del
mal de ojos.
.Las maderas duras
Son de crecimiento lento y mayor densidad. Se puede decir sin
ánimo de errar que las maderas duras son el resto de los árboles, aunque sólo
algunos se utilizan con fines comerciales. Están pues distribuidas por todos
los lugares del mundo. Son bastantes mas caras que las maderas blandas,
contando con una mayor gama de colores, granos y veteados. Muchas de ellas,
dado su precio, se usan como chapas.
Las maderas duras, a su vez, se clasifican en:
a) durísimas (por ejemplo: el ébano, el boj, la encina).
b) duras (por ejemplo: el cerezo, el olmo, el roble).
c) semiduras (la haya, el castaño).
A continuación vamos a conocer algunas de las maderas
pertenecientes a la ‘familia’ de las consideradas duras:
1) Fresno: Madera dura de grano recto y textura basta
de un color que va del pardo al marrón rojizo. En algunos casos el duramen es
mas oscuro, en cuyo caso se denomina “fresno oliva”. Su uso es muy variado,
desde mangos para herramientas, aperos agrícolas, ebanistería, chapados y
contrachapados.
Aunque es muy difícil de trabajar por la dureza que tiene los
resultados son muy duraderos.
2) Balsa: Madera dura, pero dentro de éstas es la más blanda
y ligera. Fácil de trabajar y de acabados muy buenos, sus usos más frecuentes
son la elaboración de maquetas, los embalajes.
3) Haya americana: Madera dura de grano recto, con
textura lisa y fina. Sus usos habituales son la ebanistería, el torneado y la
elaboración de muebles curvados. Su grano regular la convierte en una madera
muy buena para el cepillado y el ensamblado, con un acabado fino y suave. Sus
usos son muy frecuentes, así podemos encontrar haya americana en trabajos de
ebanistería interior, muebles, juguetes, mangos de herramientas, etcétera.
4) Haya europea: Se diferencia de la anterior en el color, es
decir, mientras la madera de haya americana es de color blanquecino, la europea
es de color pardo amarillento. El haya vaporizada es de color pardo rojizo.
Coincide con la anterior en los usos que se le suele dar a este tipo de madera
(ebanistería interior, muebles, mangos…). En la actualidad esta madera es muy
utilizada en nuestro país.
5) Boj: Madera dura, densa y pesada, de color amarillo
claro o crema claro y de textura fina. Se usa fundamentalmente en trabajos de
talla, tornería y elaboración de mangos de herramientas, así como para el
taraceado (técnica decorativa de la madera). Es una madera muy difícil de
cepillar y su acabado es duro y brillante.
6) Bubinga: Madera dura de color pardo rojizo y grano
muy irregular. Sus usos más frecuentes son el chapeado y la elaboración de
muebles y utensilios.
7) Nogal blanco americano: Madera dura de grano
desigual pero recto y textura basta; de color blanco grisáceo. Su uso es muy
frecuente en la ebanistería, chapeado y elaboración de muebles. También existe
el denominado nogal negro americano cuya diferencia con el anterior está en el
color: éste último sería de un color marrón oscuro y negro rojizo.
8) Nogal europeo: Madera de textura un tanto basta y
grano entre ondulado y recto. Con vetas oscuras, es de color pardo grisáceo. Se
utiliza habitualmente en trabajos de ebanistería de interiores, chapas y talla.
9) Castaño: Madera dura de color marrón claro, de
textura basta con grano generalmente en espiral, aunque en ocasiones también se
puede encontrar recto. De uso frecuente en España, puesto que es una madera muy
común en nuestro país. Se utiliza para multitud de trabajos en carpintería y
ebanistería, como la elaboración de muebles, ventanas, ataúdes…
10) Teca: Madera muy dura de textura basta, irregular y
aceitosa. El color es pardo, aunque tiene variaciones en función del lugar de
origen. Muy utilizada para la construcción de embarcaciones y muebles de
exterior. Dada la escasez de esta madera en la actualidad, los gobiernos
asiáticos la tienen muy protegida y está prohibida su exportación. Por ello, la
que podemos encontrar en España es de contrabando o simplemente son variedades
de teca (como la tica).
11) Cerezo: Estamos ante una madera dura de grano recto
y textura fina, con colores que van del rosa cremoso al marrón rojizo. Se trata
de una madera que puede ser tanto nacional como de origen americano. El cerezo
es una madera muy apreciada para los trabajos de ebanistería de interiores.
12) Tilo: Madera blanda de grano recto. Con colores que
van del blanco al amarillo, al contacto con el aire oscurece hasta convertirse
en marrón claro. Muy usado en la fabricación de juguetes, instrumentos
musicales y tallas.
13) Roble: Madera dura de grano recto, grueso y textura
basta. De color marrón pálido, tiene muy marcado los anillos de crecimiento. Es
una madera nacional de uso muy frecuente, desde trabajos de ebanistería de
interior hasta carpintería de exterior, entarimados, tallas, tornería,
etcétera.
14) Sicomoro: De color blanco amarillento o amarillo es
una madera de textura fina y lisa, de grano recto. Sus usos más frecuentes son
la tornería, los utensilios de cocina y entarimados.
15) Olmo: Madera dura de grano recto, muy duradera. Así
se llegó a usar para la construcción de techos expuestos a las humedades.
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